"Azotar a un Caballo Muerto"

De todas las expresiones de los navegantes antiguos hay una muy curiosa: To flog a dead horse (azotar a un Caballo Muerto) más que por lo que significa que por la incongruencia de la combinación de caballos y navegantes.








"Caballo muerto" era el nombre coloquial que recibía el primer mes que pasaba a bordo un marinero después de enrolarse en alguna tripulación. Al enrolarse recibía un mes de salario por adelantado y lo primero que hacía era gastarselo en el puerto... antes de zarpar...









Resultado, todo el mes tenía que trabajar sin cobrar nada... y si pretendía escaparse, las autoridades le perseguían y encerraban.
Los armadores sabían aprovechar esta circunstancia...
















Estas semanas se llamaban "Caballo Muerto"; los pobres marineros al haber cobrado estaban legalmente obligados a cumplir con sus obligaciones, pero se resistían todo lo que podían a trabajar más de lo necesario.



Éste era el significado de la expresión: durante el primer mes el caballo (el propio marinero) era como un animal de carga exhausto, prácticamente muerto; era inútil que realizara cualquier actividad más allá de lo acordado.










Terminado el largo mes, los marinos construían un caballo de lona o de paja, lo paseaban por la embarcación, lo izaban del palo mayor y le prendían fuego mientras cantaban la saloma del Caballo Muerto, después lo lanzaban al mar.



A esta expresión se le aplica el significado de: seguir con algún argumento o esfuerzo inefectivo, con el objetivo de avivar el interés por algunas cuestión que ya ha quedado resuelta.

Hoy no hay "enrolamiento marineril" aunque "azotar a un caballo muerto" se puede dar en algunos sectores de nuestra sociedad...