Los Mosaicos de Tarraco

En las domus y villas romanas de Tarraco encontramos algunas habitaciones que tienen pavimentados los suelos con una serie de mosaicos construidos con teselas.

Las teselas son unas pequeñas piezas de roca, cerámica o vidrio de diferentes tamaños que se iban colocando aglomerándolas en una masa de cemento.

La palabra tesela viene del latín tessellae, que a su vez viene del griego τεσσερες, (cuatro).

Por esto a estos mosaicos también se les llamaba como opus o ars tessellatum.

También se decoraron con mosaicos cúpulas de edificios...

paredes, lápidas de enterramientos e incluso se llegaron a confeccionar "retratos" de algunos personajes que se colgaban en la pared como cuadros.

El Museo Nacional Arqueológico de Tarragona, que es el más antiguo de Cataluña (se construyó a mediados del siglo XIX), recoge la que está considerada la mejor colección de mosaicos de Cataluña, algunos tan impresionantes como el expresivo Mosaico de la Medusa, del siglo II dC. que ha llegado a ser un emblema , un "escudo" de Tarragona.

Tarraco fue la primera ciudad romana fuera de la península Itálica, capital de la provincia más grande del imperio, la Hispania Tarraconense o Citerior y como heredera suya Tarragona conserva toda una serie de monumentos de esa época que le han permitido ser condiserada Patrimonio Mundial por la Unesco en el año 2.000.

Circo, teatro, anfiteatro, foro local, foro provincial, termas, arcos de triunfo, necrópolis, acueductos, murallas, canteras, puerto... en fin, restos de una ciudad Tarraco, la Scipionum Opus, obra de los Escipiones, que durante dos años, se convirtió de facto en la capital de todo el imperio (tiempo que estuvo el emperador Augusto residiendo mientras guerreaba contra los cántabros y astures), la Colonia Iulia Urbs Triumphalis Tarraco...