sábado, 13 de febrero de 2010

Mala consejera es la prepotencia...

Un representante de la Consejería de Agricultura de Guadal… visita una finca y habla con su dueño, un señor ya entrado en años. Le dice al dueño que desea inspeccionar sus recursos acuíferos.
El anciano le dice que perfectamente, pero que por favor no pasase por el terreno cercado.
El representante, demostrando su autoridad como digno funcionario guapo y apoyado, le dice:
-Mira, viejo: yo tengo la máxima autoridad de gobierno que cabalmente represento, y este 'CARNÉ' que tu ves aquí me califica para ir DONDE ME DE LA GANA, meterme en cualquier propiedad que ME DE LA GANA, sea ésta de quien sea, SIN PREGUNTAS, y tampoco debo dar respuestas.
¿ME HA ENTENDIDO o es que no me he sabido explicar?
El viejo simplemente se encogió de hombros y siguió con sus quehaceres.
Pasado un rato, el ganadero escucha unos gritos y logra ver al empleado corriendo por su vida, seguido muy de cerca por un toro semental. El toro va ganándole terreno y el tipo, aterrado pide ayuda a todo pulmón.
El viejo de inmediato deja todo lo que estaba haciendo y va hasta la cerca, gritándole a su vez:
-EL CARNET,.. ¡CORCHOS! ... EL CARNET...
ENSEÑALE EL CARNET !!!!! ..

6 comentarios:

PABLO JESUS GAMEZ RODRIGUEZ dijo...

Muy bueno. Feliz fin de semana, amigo.

Un abrazo.

Soledad Arrieta dijo...

Cómo me encanta empezar el finde con vos Luis!!!
Cariños!

Gabriela dijo...

Eso si que es como para decir que el pedante este tomó agua de su propio chocolate.

esteban lob dijo...

Hola Lluis:

Capaz que el toro haya bajado sus revoluciones por minuto, al tenor a su vista la credencial aquella. Jajaja.

Feliz fin de semana.

Anónimo dijo...

HAbría que ver si le pilló el toro, jajajajaja Visto lo visto igual habría sido hasta divertido.

Por cierto, se perdió mi blog de Tresors y he tenido que abrirlo con otro nombre, cosas de bloguer, que vamos a hacerle!!

Anónimo dijo...

Eso es lo que le puede pasar al Presidente venezolano si sigue dándoselas de soberbio contra todo el mundo, incluso contra los de su propio partido